Caminaba de noche en la oscuridad, cuando algo me izo estremecer un escalofrío recorrió todo mi cuerpo me gire pero pude ver nada mi corazón se acelero mis pasos fueron mas rápidos pero los tacones no me dejaban correr, al llegar a la esquina note una voz
_ Bona nit... Tienes fuego
Me gire temblando, solo pude ver una silueta la luz de la farola y mi paraguas no me dejaban ver mas hasta k se acerco…
Un perfume sexual de hombre acaricio mi nariz, saque el mechero las manos me temblaban que me estaba pasando, pase del miedo al deseo en un segundo, no pude articular palabra se avalazo sobre mi, el paraguas callo al suelo, la lluvia me calaba y no tenia frío era puro fuego.
Me empujo contra la pared levanto mi falda su mano penetro entre mis muslos, mientras me besaba. Un gemido se me escapo como era posible era un desconocido pero me estaba dejando llevar. Las gotas de agua recorrían mi cuerpo cuando se agacho, sus manos eran fuerte de un plomazo me arranco las medias y el tanga
cuando quise darme cuenta tenia su lengua lamiéndome el coño…
Así a su merced solo podía sujetarme contra la pared y agarrarme de su cabeza mientras el seguía lamiendo y penetrándome con su lengua
me retorcía empapada de lluvia y deseo
Se levantó besándome, note como en su boca quedaba el regusto de mi coño eso me excito aun mas
con las dos manos arranco mi blusa mis pechos quedaron fuera a su merced los miro y luego los lamió y mordió rabiosamente mis pezones
me dolía pero no podía gritar de mi boca solo salían gemidos de pasión
me estaba volviendo loca que me hiciera daño…
Luego levanto mis brazos por encima de mi cabeza sujetándome con una mano, con la otra alzo una mis piernas y empezó a rozarme su polla por mi húmeda entrepierna
Sentí sus gemidos llenos de rabia y de deseos en mi cuello mordiéndolo, succionándolo, y de repente echo la cabeza hacia atrás y de un golpe me penetro…
La sentí forzarme, abriéndose camino dentro de mi coño
La pared me rasgaba la espalda en cada envestida, mis pies apenas tocaban el suelo y yo solo podía sentir su enorme polla penetrándome una y otra vez era como un animal lleno de rabia y deseo.
Me estaba volviendo loca sigue, sigue mmm... no pares así, así ahhhhh me corro…
note como su polla inundaba mi coño como sus rabiosos gemidos resonaban en aquel oscuro callejón.
Poco a poco recuperamos la respiración, empecé a notar el suelo en mis pies y sus manos empezaron acariciarme la cintura el cuello y dulcemente levantó mi barbilla y mirandome a los ojos me susurro…
Hola preciosa…
te prometí algo espectacular y creo que lo e conseguido ¿no?
Siiii tesoro…
¿vamos arriba te preparo un baño calentito y acabamos?
Ohhhh si….
martes, 21 de abril de 2009
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2 comentarios:
Cuanta pasión y calor. Quien no se derrite?
Caricias
Vaya forma de pedir fuego....mmmm llego el calor antes de tiempo
que gusto bajo la lluvia.
muakussss
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